
La turquesa es una piedra semipreciosa de color azul verdoso muy llamativo y bonito, con unas características vetas negras. Es una piedra muy utilizada en joyería debido a su gran belleza y las diversas propiedades de la turquesa.
Origen de la turquesa
Su nombre proviene del francés: pierre turquoise. Este término significa “piedra turca”. Recibe este nombre porque Turquía era uno de los países donde se comercializaba antaño, en su ruta hacia Europa en el siglo XVI. Podemos encontrar yacimientos en lugares como Irán, Afganistán, Israel, Chile, México, Estados Unidos, China y Australia.
La turquesa ha sido empleada como amuleto desde tiempos remotos por diversas culturas: la egipcia, la azteca, la china y la persa. Es conocida como la piedra de la sabiduría para los chinos. También como la piedra de la comunicación en otras culturas. Pues en el hinduismo se le relaciona con el tercer chakra que es el de la garganta. En el budismo representa la dualidad vida y muerte, así como la tierra y el cielo.
Propiedades terapéuticas de la turquesa
Esta piedra se emplea a menudo como amuleto de protección y sanación. Esto se debe a que los aztecas creían que era una gran protector ante las malas energías y las maldiciones de los Dioses. A día de hoy, esta creencia ha llegado hasta nosotros, y en el mundo espiritual, se considera que es una piedra sanadora que infunde calma y bienestar en nosotros, a la vez que mantiene la mente en alerta. Pues es también la piedra de la comunicación.
Es un mineral azul que se asocia a la garganta. Esta piedra ayuda a la persona que la emplea como amuleto, a expresarse y a comunicarse. También favorece en las personas, el descanso y la vitalidad al mismo tiempo. Incluso hay quienes dicen que entre las propiedades de la turquesa se encuentra la de estimular la regeneración de los tejidos del organismo.
En el taoísmo y otras religiones chinas se relaciona con el tercer ojo. Lo que convierte esta piedra en un mineral perfecto para la meditación. Además, de potenciar y despertar la intuición de quien la lleva.
En definitiva, es una piedra protectora y sanadora. Por ello te recomendamos llevar un colgante de turquesa como los que encontrarás en la tienda online de Complemenzza. Así podrás llevarla cerca de la garganta, en el tercer chakra, potenciando las propiedades de la turquesa. Esto nos ayudará a expresarnos al mismo tiempo que sosegará la mente y agudizará nuestra intuición.